La historia de este monasterio medieval presenta algunas
lagunas. Su fundación esta atribuída a los canónigos de la Regla de San Agustín,
a finales del siglo XII.
Más tarde pasaría a la orden de los dominicos adscrito al monasterio de Sao Gonçalo de Amarante.
Más tarde pasaría a la orden de los dominicos adscrito al monasterio de Sao Gonçalo de Amarante.
El complejo compuesto por la iglesia, mantiene de la traza
primitiva su portal con arco de medio punto que descansa sobre tres columnas,
con sencillos capiteles y una planta de nave única y cubierta de madera.
Junto la puerta destacan la torre campanario y
el atrio enlosado.
La torre, fechada a finales del siglo XIII, es de carácter robusto
y clara intención defensiva. Su posición en el ángulo Suroeste de la fachada
articulando esta con el claustro, ahora desaparecido, y del que apenas resta el
espacio que ocupaba, proporciona al conjunto una gran presencia.
El atrio se puede deducir que es de una iglesia anterior, a través de los arranques de muros en la torre y marcas en la fachada, .
La escultura es ruda, con motivos vegetalistas y animales
de marcada influencia del románico bracarense.
