La Serra da Gardunha es un brazo de la Serra da Estrela con unos 20 Km de largo y 1224 metros de altitud máxima, constituida por una inmensa mole de granito.
Se encuentra en la región de la Beira Baixa, entre el Duero y el Tajo ,delimitada por los ríos Zêzere y Pônsul . Aquí están las fuentes del río Ocreza, que vierte sus aguas en el rio Tejo, o Tajo.
Antiguamente sus colinas estaban ocupadas por densos bosques de castaños, que había mandado plantar el rey D Dinis.
Aunque desde hace unos años, los incendios han ido destruyendo los bosques existentes. Hoy en dia la sierra es un manto verde de sotobosque , pero sin los grandes bosques de antaño, sobreviviendo pequeños bosquecillo de pinares y robles.
Esta zona es la capital de la producción de la deliciosa cereza en Portugal, recogida en las parroquias de Alcongosta y Souto da Casa.
En la Serra da Gardunha podemos visitar numerosos miradores, desde donde disfrutaremos de una excelente panorámica de la Cova da Beira y la Serra da Estrela, Belmonte y Covilhã hacia el Norte y las planicies de las tierras de Castelo Branco, Idanha-a-Nova y Penamacor si miramos hacia el Sur y el Este, respectivamente.
La Sierra da Gardunha es también un buen lugar para la práctica del parapente a donde acudean numerosos aficionados de este deporte para disfrutar de las óptimas condiciones del lugar. imagen:http://www.gardunha-verde.org
Las Aldeias Históricas de Portugal se localizan en su mayor parte en la región de la Beira interior.
Son núcleos urbanos de fundación anterior a la fundación de la nación portuguesa, casi todos ellos en tierras altas y de una gran importancia histórica.
Castelo Rodrigo
Bien conocida es Monsanto, una das aldeas más típicas del país, donde el registro de presencia humana se remonta al Paleolítico y la aldea de Almeida que constituye una riqueza histórica y patrimonial a destacar.
En el límite norte de la región encontramos Castelo Rodrigo, población fortificada desde la más remota antigüedad, la villa de Trancoso con sus juderías, y Linhares, cuyo origen se remonta probablemente al siglo IV antes de Cristo.
Trancoso
Y además están Belmonte, villa tan antigua como Portugal, Sortelha, Idanha-a-Velha, y Marialva, aldeas conocidas por su belleza natural y por los vestigios históricos que guardan.
La Beira Interior es una región marcada por el paisaje serrano, cuna de la denominación de origen a la que da nombre.
La belleza natural de las sierras da Estrela, Gardunha, Malcata o Marofa y los valles profundos y apretados ríos como el Côa o el Zêzere, las terras que componem una de las mas tradicionales zonas vitívinicolas portuguesas proporcionan a quien las visita experiencias únicas, que van desde las zonas de transición entre Trás-os-Montes y la Beira, al norte, y hasta las puertas de entrada a la grande y ondulada planicie del Alentejo, al sur.
Sao Joao de Tarouca
Para los que gustan de descubrir la historia en los lugares que visitan aquí pueden apreciar los legados cultural y monumental de los monjes del Cister, en conventos como los de Santa Maria de Aguiar y São João de Tarouca.
Podemos visitar poblaciones medievales como Castelo Rodrigo o Marialva, aldeas como a granítica Sortelha, villas bien conservadas y de gran carácter, caso de Almeida, o las ciudades históricas de Pinhel, Covilhã, Guardao Castelo Branco.
Guarda
Protegida por las sierras de la influencia atlántica, es una tierra poco lluviosa, muy fría en inverno y cálida y seca en el estío, la región posee unas óptimas condiciones para la producción de algunos de los mejores vinos portugueses.
La villa de Penamacor,en el distrito de Castelo Branco, se asienta en un alto, a 588 metros de altitud, entre las sierras de Malcata y de Gardunha, en la margen sur del río Pônsul.
Su territorio fue ocupado por túrdulos, romanos, godos y musulmanas hasta que tras su conquista, recibió carta foral de D. Sancho I, en 1.209.
Dom Gualdin Páis maestre de la Orden de los Templarios, fortificó la población en el siglo XII, dotandola de murallas y castillo, desempeñando esta un papel importante en la defensa de la frontera desde los inicios de Portugal.
Casi todos los habitantes del municipio se dedican a la agricultura, con la producción de vino, aceite de oliva, corcho y ganadería.
Por lo que han ido surgiendo en el municipio industrias dedicadas a la transformación de productos agrícolas.
Además de su patrimonio cultural e histórico, como la Iglesia Matriz y la de la Missericordia, el castillo y la torre de vigía, el Penamacor ofrece optimas condiciones para la práctica de la pesca y otros deportes acuáticos, tanto en el embalse de Meimoa como en el río Baságueda.
Sin olvidarse de que uno de los principales valores de Penamacor es la Reserva Natural de la Sierra de Malcata, cuya sede está en la población, donde habitan especies en peligro de extinción como el lince ibérico, el lobo, o la nutria.
Marialva se sitúa en la parte meridional del Municipio de Mêda en zona montañosa y granítica de topografía algo difícil e irregular, desciendo hasta la orilla izquierda de la ribera de Marialva.
Constituida por tres aglomerados, la Ciudadela, el Arrabal y la Devesa; posee actualmente amplia comunicación con el exterior a través del trozo recién construido de la Carretera Nacional 324 que conecta a Marialva a su sede municipal, así como a la Carretera Nacional 102.
Es por esta carretera que, cruzando el Municipio de Norte a Sur, se conecta con el Nordeste de Tras-os-Montes y la meseta de la Beira.
La villa de Almeida, en el distrito deGuarda, se sitúa en una zona de meseta a 2,5 Km. de la orilla derecha del río Côa y a aproximadamente 7 Km. de la frontera con España. El municipio de Almeida se constituye por 29 parroquias y presenta una considerable riqueza histórico-patrimonial.
Son tres los centros históricos: Las Aldeas MedievalesdeCastelo Mendo, Castelo Novo y el centro urbano de la villa de Almeida circunscrito por su fortaleza militar de trazado abaluartado. El Municipio es servido por la línea férrea de Beira Alta y por el IP5. Este itinerario tiene dos intersecciones de acceso al Municipio, siendo una a través de la Carretera Nacional 324 y la otra en Vilar Formoso. Vista desde el aire, esta villa fortificada parece una estrella de 12 puntas.
Almeida es hoy una villa tranquila cercana a la frontera con España, rodeada de paisajes bucólicos y llena de encanto, donde se respira el puro aire .sin embargo desde que el rey D. Dinís la tomó por las armas en 1296 y hasta el siglo XIX, esta aldea histórica fue una plaza importante en las guerras con España y soportó con éxito prolongados cercos.
Con sus murallas y baluartes es una de las más interesantes fortalezas del mundo, donde es palpable la técnica del "hexágono" del ingeniero militar de Luis XIV de Francia, Vauban. Cada ángulo del polígono es un baluarte en forma de lanza y entre ellos se yerguen otros más pequeños, los revellines.
De acuerdo con las tácticas de guerra de los siglos XVII y XVIII, esta configuración en estrella permitía hacer el cruce de tiro. Desde algunos puntos podrá observar una buena parte de esta estrella irregular de 12 puntas. En 1810, el general francés Massena cercó Almeida, que resistió valerosamente durante 17 días. Sólo capituló porque, debido a la negligencia de un soldado, el depósito de municiones explotó, muriendo unos 500 hombres de la guarnición y destruyendo el primitivo castillo medieval. Los términos de la rendición fueron firmados en la Casa de la Guardia, en las puertas de S. Francisco, donde ahora está la Oficina de Turismo.