La isla de Porto Santo, en el archipiélago de Madeira, sorprende por la variedad y exuberancia de sus paisajes, esto se debe a que está formada a partir de dos volcanes de los que en la actualidad sólo se ve una pequeña porción.
La isla cuenta con una buena red de carreteras, pero también podemos conocerla a pie, realizando excursiones, como la que recorre las principales cimas de la isla; Pico Castelo, Pico Branco, Pico Juliana y Pico da Gandaia, en la parte nordeste de la isla.
La parte más occidental se puede recorrer por un camino de 10 km que bordea unos acantilados espectaculares de origen terciario desde Fonte de Mirador das Flores, frente a la isla de Baixo, hasta Morenos.
Otra posibilidad es ruta la más corta pero de más dificultad, recorre el extremo noroeste por la Vereda do Pico Branco y Terra Cha, zona de mucha vegetación donde se encuentra el mayor número de plantas endémicas de la isla.
Uno de los paseos que dada su escasa dificultad puedes hacer por tu cuenta es el de los miradores, por altos acantilados al sur de la isla. Sólo son 4 km desde el mirador de las Flores, en Ponta da Calheta, desde el que puedes ver Madeira en dÃas daros, a Ponta de Canaveira, frente a la isla de Ferro.
0 comentarios